Se acercan elecciones una vez más. Es el
momento clave en la vida de algunos políticos, que empiezan a saber, por medio del electorado, que es lo que el pueblo realmente piensa de ellos...
momento clave en la vida de algunos políticos, que empiezan a saber, por medio del electorado, que es lo que el pueblo realmente piensa de ellos...
Es la democracia en su máxima expresión.
Pero con cada elección, también llegan las dudas nuestras, como electors.
El fantasma del fraude, siempre es presentado de antemano como arma, por si pierden. Así no tienen que reconocer que fue por sus propias falencias.
Así que las historias comienzan siempre a girar en torno a la falta de boletas de ciertos partidos o regalos que ciertos candidatos hacen a ciertos sectores para que los miren más favorablemente o incluso la inauguración de obras sospechosamente finalizadas siempre cerca de momentos electorales.
Con todos estos antecedentes en mente es que decidí iniciar mi investigación, casi por casualidad, como verán.
Hace un tiempito les dije que partía de viaje a Europa para esta misma, y así
fue.
Y este viaje, por así llamarlo, me ha llevado a Inglaterra, Italia, Portugal, Espana e Israel.
Como periodista, me ha tocado trabajar fuera del país y conocer muchos compatriotas que viven afuera hace mucho tiempo.
Esta historia es la de una señora llamada Haydee Martha que desde el 1990 vive en el exterior. Esto no quiere decir que no retorna al país o que pierde
contacto con lo que sucede. En realidad es todo lo contrario.
En 1990, Haydee llego al Reino Unido, era cercano a tiempo de elecciones de algún tipo en nuestra tierra natal. Al no poder estar presente para emitir su sufragio, fue a la embajada en Londres y se registró como ciudadana argentino, residiendo en Gran Bretaña.
En el formulario que lleno, tenían y aún tienen, todos sus datos personales. Nombre y apellido, dirección en Inglaterra, número de teléfono, numero de pasaporte (el argentino debe renovarlo cada vez que regresa al país!), número de DNI, y demás.
Con este formulario y esta declaración, se justificaba, su ausencia o imposibilidad para votar en el lugar donde estaba empadronada para hacerlo.
En fin, al registrarse, después de esa primera elección a la que no podía asistir, la sacaban del padrón de la Escuela Nacional numero 5 Bartolomé Mitre, y la movían al de Londres, donde si ella lo deseaba, podría votar de ahí en más.
No fue la última vez que debió registrarse, ya que con su trabajo debió moverse a otros países.
Así es que se registró en embajadas y consulados argentinos en (Londres, Roma, Lisboa, Madrid y Tel Aviv)
Al inscribirse en una embajada o consulado, automáticamente, su último registro debiera ser cancelado, así es que se tiene una idea de cuantos somos y donde estamos.
En 2013, más precisamente cuando sucedieron las últimas elecciones, ella estaba de visita en Argentina y le pico un poco de curiosidad. Fue al lugar donde estaba originalmente empadronada (donde no debiera estarlo más desde 1990) y descubrió no solo que aún seguía figurando en
las listas de votantes del lugar, sino que también ya “había votado” ese
día.
Obviamente hizo todos los reclamos necesarios y puso su caso en la justicia (nada ha sucedido aun que se sepa), por lo que decidió visitarme y contarme el hecho.
Se me ocurrió decirle, si quisiera visitar todos los consulados y embajadas, donde alguna vez se había registrado. Le pareció una buena idea y nos pusimos manos a la obra.
Desde haberse ido del país, no asistió a ninguna embajada o consulado para
emitir su voto, ni lo ha hecho por correo o de ninguna otra manera.
Y saben qué? Aparentemente en blanco y negro dice que ella voto siempre, en cada elección en las que se puede o podía participar desde el exterior, los records dicen que ella voto.
Es decir que a lo largo de más de 20 años, ha habido políticos que pueden haberse beneficiado de su voto, sin que ella así lo haya determinado.
Digamos que el suyo puede ser un caso aislado, pero por que debiera serlo? Cuantos como Haydee hay que se han registrado en el exterior y nunca más se han preocupado?
Con la cantidad de argentinos que hay viviendo en el extranjero, hemos descubierto que el voto del exterior cuenta y mucho.
Pero con cada elección, también llegan las dudas nuestras, como electors.
El fantasma del fraude, siempre es presentado de antemano como arma, por si pierden. Así no tienen que reconocer que fue por sus propias falencias.
Así que las historias comienzan siempre a girar en torno a la falta de boletas de ciertos partidos o regalos que ciertos candidatos hacen a ciertos sectores para que los miren más favorablemente o incluso la inauguración de obras sospechosamente finalizadas siempre cerca de momentos electorales.
Con todos estos antecedentes en mente es que decidí iniciar mi investigación, casi por casualidad, como verán.
Hace un tiempito les dije que partía de viaje a Europa para esta misma, y así
fue.
Y este viaje, por así llamarlo, me ha llevado a Inglaterra, Italia, Portugal, Espana e Israel.
Como periodista, me ha tocado trabajar fuera del país y conocer muchos compatriotas que viven afuera hace mucho tiempo.
Esta historia es la de una señora llamada Haydee Martha que desde el 1990 vive en el exterior. Esto no quiere decir que no retorna al país o que pierde
contacto con lo que sucede. En realidad es todo lo contrario.
En 1990, Haydee llego al Reino Unido, era cercano a tiempo de elecciones de algún tipo en nuestra tierra natal. Al no poder estar presente para emitir su sufragio, fue a la embajada en Londres y se registró como ciudadana argentino, residiendo en Gran Bretaña.
En el formulario que lleno, tenían y aún tienen, todos sus datos personales. Nombre y apellido, dirección en Inglaterra, número de teléfono, numero de pasaporte (el argentino debe renovarlo cada vez que regresa al país!), número de DNI, y demás.
Con este formulario y esta declaración, se justificaba, su ausencia o imposibilidad para votar en el lugar donde estaba empadronada para hacerlo.
En fin, al registrarse, después de esa primera elección a la que no podía asistir, la sacaban del padrón de la Escuela Nacional numero 5 Bartolomé Mitre, y la movían al de Londres, donde si ella lo deseaba, podría votar de ahí en más.
No fue la última vez que debió registrarse, ya que con su trabajo debió moverse a otros países.
Así es que se registró en embajadas y consulados argentinos en (Londres, Roma, Lisboa, Madrid y Tel Aviv)
Al inscribirse en una embajada o consulado, automáticamente, su último registro debiera ser cancelado, así es que se tiene una idea de cuantos somos y donde estamos.
En 2013, más precisamente cuando sucedieron las últimas elecciones, ella estaba de visita en Argentina y le pico un poco de curiosidad. Fue al lugar donde estaba originalmente empadronada (donde no debiera estarlo más desde 1990) y descubrió no solo que aún seguía figurando en
las listas de votantes del lugar, sino que también ya “había votado” ese
día.
Obviamente hizo todos los reclamos necesarios y puso su caso en la justicia (nada ha sucedido aun que se sepa), por lo que decidió visitarme y contarme el hecho.
Se me ocurrió decirle, si quisiera visitar todos los consulados y embajadas, donde alguna vez se había registrado. Le pareció una buena idea y nos pusimos manos a la obra.
Desde haberse ido del país, no asistió a ninguna embajada o consulado para
emitir su voto, ni lo ha hecho por correo o de ninguna otra manera.
Y saben qué? Aparentemente en blanco y negro dice que ella voto siempre, en cada elección en las que se puede o podía participar desde el exterior, los records dicen que ella voto.
Es decir que a lo largo de más de 20 años, ha habido políticos que pueden haberse beneficiado de su voto, sin que ella así lo haya determinado.
Digamos que el suyo puede ser un caso aislado, pero por que debiera serlo? Cuantos como Haydee hay que se han registrado en el exterior y nunca más se han preocupado?
Con la cantidad de argentinos que hay viviendo en el extranjero, hemos descubierto que el voto del exterior cuenta y mucho.